Las imágenes que nos producen sueño son quizás las únicas verdaderas, o por lo menos las que nos poermiten vivir lo que anhelamos ser, aunque a veces esos deseos se transfiguren en imágenes de horror, que nos atrapan en una red interminable de sensaciones, la pregunta es, entonces: ¿Quién controla los sueños? ¿Cómo manejarlos a nuestro antojo? Tal vez la única forma sea recordarlos cuando se camina, cuando se va a la escuela, o simplemente cuando se está sin esperanza alguna.
Lucía, una niña de 13 años, vivie una realidad que no comprende, pues sus sueños, van encaminados hacia lo desconocido, de esta manera se ve rodeada de seres que la desprecian y pretenden aniquilar su sensibilidad; es por ello que Lucía decide rebelarse pero no de forma explícita, sino atravesando el umbral de los sueños.
Lucía, una niña de 13 años, vivie una realidad que no comprende, pues sus sueños, van encaminados hacia lo desconocido, de esta manera se ve rodeada de seres que la desprecian y pretenden aniquilar su sensibilidad; es por ello que Lucía decide rebelarse pero no de forma explícita, sino atravesando el umbral de los sueños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario